Algo en lo que la mayoría de nosotros rara vez pensamos es en la manera en cómo las influencias externas afectan nuestras vidas. Todos los días somos bombardeados con información proveniente de la TV, las radios, los teléfonos celulares, las computadoras, amigos, colaboradores y clientes. A su manera, una pieza de información afecta nuestra forma de pensar o de actuar. Sin embargo, el efecto acumulativo de toda esta información durante un período prolongado puede tener un efecto muy profundo en quiénes somos, en cómo nos vemos a nosotros mismos y al resto del mundo.
Las noticias y programas de interés general emiten un mensaje abrumadoramente negativo. Generalmente destacan las historias de muerte, la destrucción, el engaño y el fraude. Muy rara vez proporcionan historias de triunfo o de heroísmo. La principal razón para ese desequilibrio entre el contenido positivo y el negativo es simplemente porque las historias negativas venden mucho más que las historias positivas. Muchas más personas se apresuran a ver un gran edificio en llamas que a ver a un sujeto que recaudó $ 10,000 para el hospital local. ¿Has notado cómo la mayoría de la gente, cuando se le pregunta, cómo son, tienen una breve respuesta positiva o una larga respuesta negativa? Si están bien probablemente dirán “Estoy bien” o “Todo bien, gracias” Pregúntale al hombre con el problema en su espalda y probablemente pasará los próximos 10 o 15 minutos contándote acerca de las operaciones que ha tenido que soportar y de cómo ese dolor en la espalda lo limita. Nos resulta mucho más fácil hablar sobre los aspectos negativos de nuestra vida en lugar de hacer cosas positivas.
Entonces, ¿cómo nos afecta esto realmente y cómo tomar el control de modo que podamos descartar lo negativo y abrazar lo positivo? Nunca podremos eliminar las influencias negativas completamente y no siempre deberíamos tratar sobre eso – la vida tiene aspectos negativos y todos debemos ser capaces de soportarlos y de superarlos. Podemos tratar de equilibrar las cosas, ya que hay más influencias y experiencias positivas en nuestro día a día que negativas. Una buena manera de comenzar es no viendo u oyendo las noticias de cada día. La gran mayoría de las noticias no tienen ningún efecto directo en tu vida, excepto reforzar una visión negativa del mundo en general.
Si estás realmente comprometido a mejorar tu estilo de vida y convertirte en una mejor persona, entonces necesitas focalizarte en las cosas que realmente importan y abrazar las actividades que te ayudarán a alcanzar tus metas, y rechazando las actividades que te impedirán el logro de esos objetivos. Las noticias negativas, los comentarios, y las influencias, no te aportan nada, así que deja eso de lado, o al menos reduce el tiempo que les dedicas y ya será un cambio muy lógico y positivo. Escuchar audios sobre el desarrollo personal, leer libros sobre la motivación o mirar videos, es un gran camino para conseguir una dosis diaria de influencia positiva. Si tienes que desplazarte para ir al trabajo cada día entonces el coche puede convertirse en tu aula móvil.