Un caballerango es el que pasea, baña, peina y se asegura que el comedero del caballo o caballos que le toca cuidar y atender esté siempre listo. Ese fue el oficio de Luis González durante siete años. ¨Ganaba muy bien, hasta 5,000 dólares al mes, pero trabajaba los 7 días a la semana. Los caballos que yo cuidaba eran de carreras. También me tocaba correrlos algunas veces. Me levantaba todos los días a las 4 de la mañana y terminaba muy tarde. No tenía vida.¨ Asegura Luis.
La rutina de Luis cambió un día que decidió tomarse la tarde libre. ¨Me puse a buscar libros de superación en mi Ipad y me encontré con una aplicación gratis le hice click y era la de Carlos. Le hice click porque era la única gratis, aclara. Me llamó la atención su historia,cómo empezó y cómo fue progresando en su negocio. Y me dije. Si él lo pudo hacer por qué no yo y así seguí escuchándolo por varios meses. ¨ Afirma optimista Luis.
El trabajo sin descanso no es ajeno en su vida, asegura que durante sus años de estudiante, le tocó dormir, durante dos años, en un sillón del restaurante donde trabajaba porque no le alcanzaba el tiempo para ir a su casa. ¨Me tuve que salir de la escuela porque no aguanté. Me hubiera gustado terminar la preparatoria pero era demasiado.¨ Cuenta Luis.
Asegura que igual como muchos otros, buscó un mejor futuro en Estados Unidos y de Arizona se mudó a Nueva York y luego a Freehold, New Jersey. ¨Un día Carlos habló de que trabajando para otros uno no iba a lograr nada. Ya tenía meses escuchándolo, pero eso me decidió a ya no trabajar para otros y me mudé a Los Angeles. Encontré un departamento en North Hollywood y ahí vivo ahora.¨ Asegura Luis.
Cuestionado sobre su decisión de dejar un empleo seguro por un proyecto empresarial afirmó: ¨Carlos dijo, Yo no voy a dejar California para ir a buscarte. Tú tienes que venir para acá. Y aquí estoy. He asistido a varios de sus seminarios, y en las giras encontré mucha mercancía que puedo vender. Ya tengo mi puesto en el swap meet y me he asociado con otros para que haya variedad de productos en mi puesto.¨
Luis González no se desanima porque sus ventas han estado lentas en el swap meet. Yo llegué hace dos meses y apenas tengo un mes vendiendo en el swap meet. Sé que no es fácil, le voy a echar todas las ganas. ¿Extraña los caballos en Nueva Jersey? ¨Ellos me extrañan a mí. Mi patrón me ha llamado varias veces. Me dice que mi trabajo me está esperando. Por lo pronto voy a tratar de establecer también mi negocio en línea. Si me resulta lo puedo hacer de donde esté en Nueva York o en México. Tengo una casa a la que le invertí 100 mil dólares. Tengo varias opciones, por lo pronto pienso quedarme y no perderme ni un entrenamiento de Carlos.¨ Asegura González.