Ese empleo que tienes, no es malo, lo malo es estancarte en ese trabajo con el sueldo mínimo, te aseguro que el precio de tus sueños no sobrepasa el salario mínimo que recibes por tu trabajo y si crees que es todo lo contrario, déjame decirte que más dinero en tus manos no te va a ayudar.
No importa cuánto dinero generes, porque siempre vamos a querer más, olvídate de lo material, pues es una limitante de nuestra mente, ya que la mayoría de las cosas que queremos, las queremos porque alguien nos dijo que las ocupamos y esa es la labor de un mercadologo.
Por ello, pregúntate ¿qué te motiva
a arriesgarte y tomar acción para emprender? La mayoría de la gente quiere
resultados extraordinarios, pero haciendo cosas ordinarias y así nunca
cumpliremos esas metas que tanto deseamos. Todos tenemos sueños y
conforme crecemos nos damos cuenta de que no son fáciles de lograr, ya que conforme vamos creciendo nos damos cuenta del
valor específico de las cosas, te invito a que reflexiones y recuerdes ¿cuál era tu sueño
de niño?
Si supuestamente ahora sobresalir y emprender es
más fácil ¿por qué no hacemos algo para lograr esos sueños?, ¿Por qué nuestro sistema no valoriza la
educación y la capacita para el futuro? Y la respuesta es que capacitarnos para
el futuro, al sistema no le conviene.
Desafortunadamente, ahora nos acostumbramos a ver y escuchar lo que no nos conviene, y no lo que necesitamos, porque la distracción y ociosidad es más divertida que la capacitación y el aprendizaje con objetivo. Hay una frase de Tony Roberts que dice, “la calidad de tu vida será determinada por las preguntas que te haces”.
Al pensar nuestras metas siempre generalizamos y
ese es un problema para poder establecer el primer paso para lograrlas. Así
pues tenemos un grave problema, puesto que hablamos en términos muy extensos y poco
tangibles, por ejemplo: “yo quiero ser
exitoso”, si está frase y pensamiento la delimitamos o la especificamos
aparecerán datos determinantes que nos incomodarán, ya que ser exitoso es algo
subjetivo y cada quien interpreta el éxito de diferente manera. La razón por la
que nos cuesta ser muy específicos es porque nos cuesta valor y cada meta tiene
un precio.
Hoy en día tenemos la tecnología y el conocimiento, antes era complicado importar productos pero ahora ya puedes importar de China con poco presupuesto, sin embargo, ¿por qué vivimos en el conformismo? La mayoría de las personas no quieren fracasar pero por el simple hecho de no hacer algo, ya están perdidos en el fracaso.
Recuerda que tus metas personales le darán vida a tus metas empresariales.
Por ello, te reto a que saques del closet ese sueño guardado, pues el no darle vida a ese sueño nos amarga la vida. Si tú quieres tener automotivación debes de sacar ese sueño de tu archivo mental. Hoy quiero que sepas que tus metas son accesibles sin tener en consideración donde te encuentres.
¿Qué te detiene a lograr lo que tu corazón realmente quiere? Reconéctate con lo que realmente quieres, todo es posible con fe y paciencia, solo debemos ser específicos de lo que queremos y porque lo queremos.
Cuando tu ejerces y le das vida a lo que realmente quieres, ¡Brillas¡
Mira mi consejo completo en el siguiente video.