¿Sientes que tienes muchas cosas que hacer y que no tienes el tiempo suficiente para hacerlo todo? Cuando tu vida está de cabeza, no puedes dejar que el ajetreo tome el control de tu mente. Tienes que ponerte primero a ti mismo para conservar tu salud mental.
A continuación ocho consejos para mantener una mente despejada
1 Organízate. Tu vida puede ser mucho más fácil si te mantienes organizado. Ahorrarás tiempo y obtendrás una sensación de control sobre las circunstancias que te rodean. El tiempo que ahorres te permitirá cuidar de ti mismo con ejercicios de relajación o con la búsqueda de hobbies que puedas disfrutar.
- Has cada día una lista de cosas que hacer. Prioriza tus actividades de la más importante a la menos importante. Conforme avance el día, ataca las actividades más importantes primero. Al final, podrás terminar el día con la tranquilidad de saber que utilizaste tu tiempo de la manera más efectiva posible.
2 Dedícate tiempo a ti mismo. Has tiempo para ti mismo cada día, sin importar lo ocupado que estés. Date el permiso de relajarte y de disfrutar esos momentos, aunque sepas que aún tienes cosas por hacer. Debes permitirle a tu cuerpo, mente y alma que recarguen baterías para poder ser productivo cuando vuelvas a tus actividades.
3 Encuentra algo que te relaje. Cada quien tiene sus actividades que le ayudan a relajarse. Tal vez te sientas cómodo con un largo y tibio baño de burbujas, o acurrucándote en el sofá leyendo un libro. Encuentra algo que te guste, respira profundamente y relájate.
4 Cuenta hasta diez. Si sientes que las presiones de la vida te están alcanzando, rescátate a ti mismo antes de que pierdas la calma. Da un paso atrás y cuenta hasta diez lentamente. Esto te dará tiempo para despejar tu mente y decidir la manera más eficiente y apropiada de actuar.
5 Medita. La meditación es una gran manera de calmar tu mente y de recuperar la concentración cuando la vida parece estar fuera de control. Con la meditación, puedes aprender a concentrarte respirando profundo, mientras descubres más sobre ti mismo.
- Cuando aprendes a concentrarte en tu respiración, podrás darte cuenta que tu respiración es poco profunda cuando estás estresado. Aprende a respirar profundamente desde el abdomen para obtener una mayor sensación de paz durante las tormentas de la vida.
6 Ejercítate. El ejercicio es una excelente manera de aliviar el estrés y recuperar una perspectiva despejada. Una cantidad moderada de ejercicio diario es todo lo que necesitas para mejorar tu condición física. Encuentra un tipo de ejercicio que disfrutes y practícalo hasta que se convierta en un hábito. Pronto odiarás faltar a una sesión de ejercicio, y tendrás más energía durante tus días estresantes.
7 Da un paseo por la naturaleza. Date tiempo para salir y disfrutar de un rato al aire libre. Saca de tu mente tus actividades y pendientes. En lugar de pensar en la interminable lista de pequeñas cosas que debes hacer, toma conciencia de lo que es realmente importante, observando y escuchado detenidamente a la naturaleza que te rodea.
8 Un paso a la vez. A menudo tendrás que hacer malabares en la vida con muchas situaciones diferentes a la vez. Es abrumador si tratas de pensar en cada una de ellas al mismo tiempo.
- Concéntrate en una tarea a la vez, y trabaja en eso hasta que esté completo. Después pasa a la siguiente tarea. Si sigues poniendo un pie delante del otro, pronto completarás todo en tu lista de cosas que hacer.
Recuerda que no estás solo. Si necesitas hablar con alguien acerca de tu ocupada vida, busca a las personas positivas en tu vida, a quienes realmente se preocupan por ti. A veces, simplemente hablar puede ayudarte a despejar tu mente de todo.
¡Prueba con estas ideas, y empieza a experimentar hoy la paz que te mereces!